Por Luis Fernando Charrupí (*)
Representantes de sectores diversos y opuestos vienen dialogando en Villavicencio sobre las problemáticas sociales más urgentes de la región. ¿Cómo abordar estos conflictos y lograr consensos? Para eso construyen una propuesta.
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Líderes del Meta se han puesto de acuerdo en temas clave para el desarrollo de la región. |
Las tensiones sociales en el Meta giran en torno a temas como la formalización y el uso de la tierra, la afectación al medio ambiente y los problemas de gobernanza. Así lo consideran unos 30 líderes de este departamento que aceptaron – desde hace casi dos años- la propuesta de sentarse en la misma mesa con personas que representan a sectores con intereses políticos, económicos y sociales muy opuestos y diversos.
Inicialmente, el propósito de la convocatoria era demostrar que se puede dialogar constructivamente y con respeto sobre distintas temáticas que dividen a la sociedad y llevan a la polarización. Las citas han sido confidenciales y periódicas. Acuden ganaderos, terratenientes, académicos, líderes sociales y de juventudes, gente de izquierda, centro y derecha; así como miembros de los partidos Centro Democrático y Polo Democrático. También hay voceros de los gremios.
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Diego Bautista, de Diálogos Improbables. |
La iniciativa, apoyada por la comunidad internacional y dirigida por la sociedad civil, se conoce como plataforma de Diálogos Improbables y busca contribuir a la solución pacífica de los conflictos en el territorio. En los encuentros se viene construyendo una propuesta sobre cómo convivir socialmente y tramitar las diferencias sin agresiones, la cual será presentada a los metenses en los próximos meses.
“Los habitantes acá tienen conciencia de lo que pasó en relación con el conflicto (armado). En el Meta la convivencia es muy importante porque posee un territorio riquísimo, pero existen unas tensiones fuertes sobre la injerencia de las grandes empresas en términos de petróleo, por ejemplo. El tema del desarrollo ,naturalmente, genera divisiones que se tienen que abordar de manera constructiva”, sostiene Diego Bautista, coordinador de la plataforma.
Hacer uso de las armas para resolver los desacuerdos, acabó con la tranquilidad por más de 50 años en las regiones de Colombia. Por eso, DESPENSA DE PAZ quiso consultar a diez líderes, participantes en los diálogos, en relación con los efectos directos de la convivencia en la competitividad del departamento.
1. “Aprender a estar en desacuerdo sin agredirnos. Nos hemos matado durante 200 años por cualquier cosa”: Clara Serrano, directora de la Asociación de Empresarios de la Orinoquia.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Si hay convivencia, el desarrollo se da fácilmente. Pero, ¿cómo puede progresar un país que está en guerra, si se asesinan a los jóvenes, si todos nos matamos? No hay producción. No hay sostenibilidad. No hay forma de hacer un avance económico, ni social, ni ambiental. La convivencia es lo que se necesita para poder desarrollar al Meta, en este caso, pero yo diría que a todo el país. Pongámonos en el lugar de la otra persona. Nadie es totalmente malo ni totalmente bueno.
En este departamento yo propondría un desarrollo agropecuario, agroindustrial, turístico e incluso de minería bien hecha. Que sea sostenible porque si la gente no tiene cómo conseguir ingresos, pues termina talando, haciendo cosas que no debe hacer.
2. “La última frontera agrícola del país está aquí. Debemos apropiarnos del territorio”: José Martínez Guchuvo, secretario general de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos de Colombia (ANUC).
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Hay una conflictividad grande con la tierra y el uso de los suelos. Es necesario que haya una intervención también institucional para hacer una regulación de la propiedad en el departamento. Además de un direccionamiento en el uso adecuado de los suelos. Esta es una economía que sigue cumpliendo una función más de la concepción extractivista que de una apropiación sostenible económica. Aquí es bueno llamar la atención para que los nuevos liderazgos se apropien del territorio y se unan con la gente para construir una alternativa económica sostenible.
Y en materia de convivencia, la conclusión es que si la democracia no mejora, no empezamos a elegir con una mayor responsabilidad, seguramente el espacio de convivencia también va a tener muchos inconvenientes. Lo que hacemos aquí es la muestra de que podemos dialogar sin agresiones, sin violencia.
3. “Tenemos que empezar a cambiar desde nosotros como sociedad. En este momento, la radio comunitaria es muy importante”: Yolanda Plazas, presidente de la Red de Emisoras Comunitaria del Meta. Hace parte de la Federación Nacional de Medios Comunitarios.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
A nivel de desarrollo del departamento, diríamos que está todo por explorar. Venía de una dependencia muy petrolera, pero hoy en día ha llegado mucho inversionista. No solo del país, sino extranjeros quieren cultivar la tierra. El conflicto ha impedido que muchas personas tengan la posibilidad de sembrar, de sacar sus productos, porque no están las vías, porque no tienen un sistema de mercadeo que les garantice la venta de sus cosechas.
La convivencia es muy importante para el desarrollo. Si no hay una tranquilidad, si no hay una seguridad para la gente que habita el campo, que cultiva el campo (pequeños o grandes empresarios), pues difícilmente vamos a ver próspero al departamento del Meta. El gobierno está haciendo un esfuerzo grande - lo vimos desde la administración de Santos - de buscar el camino para lograr esa paz.
4. “Los dirigentes políticos tienen que entender qué es lo que necesitamos y queremos como comunidad”: Martha Inés Gonfrier, representante de la Asociación para la Defensa de la Tierra y la Dignidad Llanera (Dignillanos). Trabaja en el sector ganadero.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Es clave la formalización de la tierra para poder entregarse del todo a trabajar y hacer proyectos productivos, buscando la competitividad. Nosotros somos un departamento agrícola y ganadero por naturaleza. Igualmente, necesitamos que se respete el medio ambiente por parte de actores extraños al territorio. En el campo hemos cuidado mucho nuestros recursos hídricos y forestales. Para nosotros, el agua lo es todo porque si no la tenemos ,no podemos crear empresa ganadera o agrícola.
También pedimos posibilidades, vías terciarias, puentes, comunicación y una red de mercadeo. Uno tiene que tener clara la visión, primero la comercialización y después hacer una inversión segura, donde se va a poder tener una productividad. Otro tema importante es la convivencia para no matarnos. Debemos dialogar para poder construir, basados en la diferencia, y sacar adelante el departamento.
5. “Es clave darle igual reconocimiento a los actores en la discusión y no imponer criterios”: Nilson Arana, periodista y psicólogo, especializado en opinión pública.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Me parece que un paso importante para la convivencia y el desarrollo es decirle al departamento que hay unos principios, que presenta el grupo de diálogos improbables, para que discutamos cualquier tema. Al final lo que cada persona busca es ser feliz y esto no se logra si el entorno en el que vivimos es adverso. Si hay inseguridad y existe riesgo de que se pierda la vida por opinar diferente a otro grupo.
Es necesario poner en la agenda del Meta la discusión de los conflictos sociales que hoy hay. Estos se relacionan con el uso del suelo, el ordenamiento, la minería, la actividad agropecuaria, el medio ambiente y la gobernanza.
6. “Nos inquieta que solo se estén impulsando monocultivos como la palma, que absorben mucha agua”: Julio César Chamarravi, presidente de la Asociación Indígena Unuma, de Puerto Gaitán.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
El desarrollo debe ser sostenible. Pensar que no solamente la agroindustria o los hidrocarburos es lo que debe tomarse. Hay que saber articular los grandes megaproyectos que existen para el mismo progreso. Por ejemplo, es fundamental impulsar el turismo y otras actividades para apoyar al campesino y que pueda vivir en sus fincas. En la parte ambiental es bueno revisar la contaminación con químicos usados en los grandes monocultivos.
En cuanto a convivencia, nos tenemos que comprometer todos para que estemos realmente en paz y esta empieza hablando desde la misma comunidad, la familia y la sociedad. Un principio fundamental de nosotros los indígenas es la unidad. Precisamente la palabra Unuma hace alusión a que todos unidos hacemos los trabajos.
7. “La convivencia va a ser necesaria para concentrarnos en asuntos que son estratégicos para el desarrollo”: Esperanza Duque, ha trabajado en la academia y en proyectos con comunidades rurales.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Mientras el departamento siga enfrascado en conflictos que pudieran resolverse de otra manera, pierde el tiempo. Aquí tenemos tensiones de ocupación de la tierra, de ocupación de los parques naturales, pero también en temas de producción y convivencia. Hay mucho temor que la industria extractivista afecte de manera significativa la mayor riqueza del territorio: el agua.
El Meta necesita una hoja de ruta a futuro. Tal vez lo que ha hecho falta es que nos pensemos a largo plazo. Somos inmediatistas. Estamos pensados para cuatros años, o sea para periodos de gobierno. Eso no sirve cuando los asuntos tienen que ser estructurales para desarrollar el territorio.
8. “La crisis actual es generada por una política de sustituir producción nacional por producción extranjera”: Eudoro Álvarez, dirigente gremial agrario y activista político.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Yo, por ejemplo, valoro mucho que se haya firmado el acuerdo de paz porque como productor agropecuario hoy puedo caminar con relativa tranquilidad en las zonas rurales. Entonces, en eso ha habido un avance enorme. A nivel de desarrollo, este es un departamento despoblado con apenas un millón de habitantes. Esa es una característica que genera posibilidades para ocupar el territorio por personas que, como en la violencia de los años 50, vinieron a posesionarse aquí.
Digamos que somos proveedores de alimentos más allá de las capacidades de consumo que tenemos. Y el hecho de tener a Bogotá cerca hace que sea una zona promisoria. El Meta es un departamento con una vocación agrícola enorme, pero desafortunadamente con muy pocos niveles de transformación. Aquí lo único que no se vende en pepa es el arroz y la palma. Hay que crear un ambiente favorable para la producción.
9. “Hay muchos factores que influyen en la competitividad de un territorio: por ejemplo, la educación”: Andrea Cristina Bolívar, defensora del medio ambiente en Cumaral.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Definitivamente si no hay convivencia, si no hay respeto por la diferencia, el desarrollo se dificulta. Si estamos todos jalando para un lado diferente, pues el progreso del territorio es muy difícil. Entonces el llamado es a esa convivencia.
10.“Funcionarios públicos deben reconocer las necesidades que tiene la población metense, especialmente en el agro”: Islena Rey, presidenta del Comité Cívico por los Derechos Humanos del Meta.
¿Qué necesita el Meta para avanzar hacia el desarrollo sostenible y mejorar la convivencia?
Hay que proyectar, hay que articular esfuerzos. El despojo de tierras también es uno de los factores que influye en las conflictividades que tenemos en nuestro departamento y la región. Si las comunidades tienen estabilidad integral, son escuchados y sus dificultades resueltas, el territorio se desarrolla, según las prioridades de los mismos.
*Periodista y locutor comercial
@LuisFCharrupi
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